A segundo debate pasa la Reforma Tributaria
Tras una jornada que ocupó todo el día este martes, las comisiones terceras de Senado y Cámara , de manera conjunta, aprobaron el proyecto de reforma tributaria en su primer debate.
Con ello, el IVA del 19 por ciento, el incremento en el impuesto a los cigarrillos, el impuesto a la gasolina, la reorganización para la unificación de la tributación de las empresas, la eliminación del tributo a la riqueza, la permanencia del 4×1.000, el impuesto a los dividendos, entre otros, están a medio camino de ser ley.
Hacia la media tarde, luego de declarar la sesión permanente, fue votado en bloque casi el 40 por ciento del contenido de esta propuesta, la cual ha generado todo tipo de reacciones, ya que hacía 20 años no se incrementaba el IVA y ahora la tarifa general pasará del 16 al 19 por ciento.
La iniciativa, con más de 300 artículos, tuvo cerca de 500 proposiciones, muchas de las cuales quedaron como constancia para el segundo debate en plenarias. Los artículos nuevos que traía la ponencia también fueron votados en bloque y, para el final, quedaron tres temas gruesos: el incremento en la tarifa del IVA, el impuesto de renta de personas naturales y la deducción de la contribución a los fondos de pensiones.
Alejandro Carlos Chacón, coordinador ponente del proyecto, fue el encargado de argumentar la necesidad de transformar el Estatuto Tributario. Su intervención se dio después de que fueran presentadas las dos ponencias alternas que se cursaron.
Una fue la de Antonio Navarro, que logró dejar varias propuestas en el documento aprobado. La otra, la del Centro Democrático, que se radicó horas antes de la ponencia mayoritaria, se opuso al incremento del IVA, entre otras objeciones, pero fue votada en forma negativa.
Todas las transformaciones que le hicieron los congresistas ponentes al proyecto original, en reuniones con el Gobierno, condujeron a que el recaudo –hasta ahora– se reduzca en 1 billón de pesos en el primer año (2017), en comparación con lo que esperaba el Gobierno: más de 7 billones de pesos. La posición de Antonio Navarro, otro de los coordinadores ponentes, sobre la necesidad de tramitar una tributaria se volvió unánime entre los parlamentarios. Sostenían que la idea de subir el IVA y apretar la carga tributaria, principalmente a las personas naturales, no llegó en el mejor momento, teniendo en cuenta que la economía viene en un proceso de desaceleración y la inflación, hasta hace cuatro meses, avanzaba en su escalada alcista.
No obstante, Navarro sostuvo que, en medio de las necesidades financieras del Estado colombiano, era necesario buscar fórmulas más allá del incremento en el IVA para no afectar a los colombianos. Por ello, de manera unificada, los congresistas se opusieron al incremento de la base gravable del impuesto de renta que inicialmente planteó el Gobierno, con lo cual, 500.000 personas, más que todo de menores ingresos, entrarían a ser contribuyentes.
El senador Fernando Araújo, del Centro Democrático, expuso la ponencia de su partido, en la que sostuvo que el IVA podría frenar aún más el crecimiento de la economía del país, de la cual se espera, en el 2016, un rendimiento no mayor a 2 por ciento. Argumentó que el consumo en el país explica el 65 por ciento del total de la producción, y el incremento del IVA golpeará ese ritmo.
De igual manera, se manifestó en contra del incremento del impuesto a las ganancias ocasionales, que pasan de 3 a 4 por ciento. “Colombia tiene una tarifa baja y un recaudo menor al de los países vecinos porque los ingresos de las personas son bajos. Mientras tanto, hay una evasión que puede llegar al 65 por ciento”.
A su turno, al representante Chacón le correspondió defender la propuesta del Gobierno, no sin antes destacar que los parlamentarios lograron transformar el proyecto original en favor de los asalariados. “Es necesario defender la sostenibilidad fiscal porque de ella depende la política social con la cual se beneficia a los colombianos con menores posibilidades”. El congresista y copresidente del Partido Liberal explicó que a cambio del aumento del IVA, el alivio para los colombianos con escasos recursos viene por el lado de no gravar al internet para los estratos 1, 2 y 3; la no ampliación de la base gravable de los que pagan impuesto de renta y el mejoramiento de la competitividad de las empresas para que generen empleo. Sin embargo, expresó que “este mejoramiento empresarial no podía ser a costa de la clase trabajadora”. Esto implicó una serie de movimientos en las fuentes de recaudo, por lo que, según Hernando Padaui, los recursos que se obtendrán serán muy cercanos a los que tenía previsto el Gobierno en su proyecto original. Por su parte, la senadora Olga Lucía Velásquez destacó el hecho de que las comisiones terceras hayan tenido confianza en el trabajo realizado por los ponentes y coordinadores ponentes, toda vez que aunque hicieron llegar tantas proposiciones como artículos equivalentes a dos reformas tributarias, al final, no cambiaron una sola coma a la ponencia aprobada. El debate último, en plenarias, no será fácil, pues hay congresistas, como Víctor Correa, que propusieron revivir el impuesto a las bebidas azucaradas, el cual se eliminó en la ponencia votada. Mientras los que se mostraron a favor de esta medida la defienden como benéfica para la salud de los colombianos y para las finanzas de ese sector, los que abogaron porque se quitara del proyecto de ley sostenían que esa es una bebida popular, de consumo regular entre los colombianos más pobres.
Otros de los aspectos destacados en la reforma aprobada es la medida para desestimular el uso del efectivo, cuyo límite se incrementó de 2 a 3 millones de pesos. Sobrepasar dicho tope implicará perder beneficios tributarios.
Jueces ponen el sombrero
La Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado pidieron al Gobierno incluir en la reforma tributaria la garantía de recursos para el funcionamiento de la Rama Judicial.
La propuesta se llevó al Ministerio de Hacienda y busca aumentar ingresos obtenidos por aportes de servicios notariales, los provenientes de operaciones de remate, además crear una contribución especial para laudos arbitrales y sentencias de contenido económico. Tribunales y juzgados administrativos del país respaldaron la idea, pues, además, plantea que se aumente del 10 al 15 por ciento el dinero que se recauda por ingresos brutos que reciben notarías y que por ley debe ir a la administración de Justicia.
Proponen también que la contribución especial calculada a partir de gastos de funcionamiento de los tribunales arbitrales ya no solo cobije como aportantes a los árbitros, sino que incluya a los secretarios de esos tribunales.
Aun con IVA del 19 por ciento habrá menos recaudo
En las cifras entregadas por el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, se aprecia la honda transformación que tuvo el proyecto original, el cual, según Alejandro Carlos Chacón, “tuvo una peluqueda visible”. Según Cárdenas, inicialmente se esperaba un recaudo de 7,1 billones de pesos en el primer año, para luego pasar a 9,6 billones de pesos en el 2018 y lograr en el 2019 la cifra de 15,9 billones de pesos. No obstante, dejar quieto el esquema de tributación de los asalariados más otros cambios aquí y allá llevaron a que durante el primer año se deje de recibir 1 billón de pesos; en el segundo año, 2,4 billones, y en el tercero, 3,4 billones de pesos.
Uno de los impuestos que más impacta la bolsa del recaudo para la financiación del Estado es la eliminación del artículo que creaba el impuesto al consumo de bebidas azucaradas, por el cual se dejarán de percibir 987.000 millones de pesos en el primer año; 1 billón de pesos en el segundo y 1,1 billones en el tercero.
El senador Antonio Navarro reiteró que era partidario de esta iniciativa, por lo que expresó que “ganó el lobby y perdió la opinión pública”. El impuesto al consumo, que solo cambió algunos sujetos obligados, reducirá los ingresos en 68.000 millones de pesos en el primer año. Otra medida que generó resistencia y que impactará el recaudo es la de mantener sin IVA a las loterías. La disminución de recursos por esta vía será de 104.000 millones de pesos en el primer año. Entre tanto, dejar las publicaciones periódicas exentas de impuesto aportará una disminución de 21.000 millones de pesos en el primer año. Otra de las medidas que se adoptó es la del no cobro de IVA a viviendas nuevas, por lo cual, en el 2017 no se contará con 170.000 millones. Claro está que la baja más sensible en la expectativa de recaudo la aporta el tema del impuesto de renta de personas naturales, a partir del cual, el Gobierno aspiraba a recaudar 1,2 billones de pesos en el 2018.
Otro de los puntos en los que el Gobierno cedió ante las peticiones de los ponentes fue el de la reducción en la tarifa de renta de zonas francas, del 24 al 20 por ciento. Dicha medida iba a representar, en el 2018, ingresos por 159.000 millones de pesos.
Otro hueco en el recaudo lo hará la decisión de revivir la exención a los constructores que se dedican al negocio de vivienda de interés social (VIS) y vivienda prioritaria (VIP), por lo cual se dejará de recibir 210.000 millones de pesos en el 2018.
Cabe destacar que para intentar equilibrar las reducciones, se estableció una sobretasa de renta para las personas jurídicas, con lo cual, la expectativa de recaudo es de 630.000 millones de pesos en el 2017 y de 676.000 millones en 2018.