“Discreto encuentro en Mar-a-Lago crea dudas sobre la paz en Colombia y Trump”: El Nuevo Herald
En una articulo publicado por el diario de Miami, El Nuevo Herald y firmado por Franco Ordoñez y Anita Kumar, se dice, que El presidente Donald Trump se reunió discretamente el fin de semana pasado con dos ex presidentes colombianos en Mar-a-Lago, lo que involucra a su gobierno en una batalla de poder en América Latina y amenaza con socavar el controvertido acuerdo de paz con las FARC.
Los otros apartes de la nota periodística manifiesta:
Se espera que el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, presione a Trump para que apoye el acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en su primera reunión en la Casa Blanca el próximo mes. Santos desea que el gobierno y el Congreso estadounidenses mantengan la promesa de $450 millones en asistencia prometida por el entonces presidente Barack Obama para implementar el plan de poner fin al conflicto armado más prolongado en la historia de la región.
La reunión entre Trump y los ex presidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana –en la que se informa también participó otro influyente crítico del plan, el senador federal Marco Rubio, de Florida– no estaba en la agenda oficial del Presidente y no se informó a los reporteros que viajaron con él a Palm Beach.
Sean Spicer, secretario de Prensa de la Casa Blanca, declinó inicialmente responder preguntas sobre la reunión, lo que llevó a numerosas especulaciones en los medios colombianos. Diarios, portales noticiosos y radioemisoras de Colombia debatieron su significado, e incluso si la reunión se había concretado. “No tengo nada que decir en este momento”, dijo Spicer el miércoles cuando le preguntaron.
Posteriormente, la Casa Blanca confirmó la reunión a la cadena de diarios McClatchy, pero le restó importancia, diciendo que era una mera coincidencia que los dos ex presidente colombianos, que se oponen al plan de paz, hubieran visitado el club del presidente.
“Estaban allí con un miembro del club y se saludaron brevemente cuando el presidente pasó junto a ellos”, dijo la portavoz Sarah Huckabee Sanders. “No hubo nada más allá de un saludo rápido”.