Ataque terrorista en el corazón de Manhattan deja ya ocho muertos
Ocho personas murieron y más de una decena resultaron heridas el martes cuando el conductor de una camioneta arremetió contra ciclistas y peatones en el sur de Manhattan y luego se estrelló con un bus escolar en lo que las autoridades catalogaron como un “acto terrorista”.
El hombre salió de la camioneta alquilada sosteniendo dos pistolas falsas, antes de ser baleado por la policía y detenido, explicó la policía de Nueva York (NYPD) en su cuenta Twitter.
El incidente ocurrió muy cerca de una escuela secundaria y otra primaria, mientras los niños de la mayor ciudad del país celebraban Halloween. Fue el primer acto vinculado al terrorismo en Nueva York desde la explosión de una bomba casera en septiembre de 2016 en Chelsea que dejó 31 heridos leves. Un afgano de origen estadounidense, Ahmad Khan Rahimi, fue condenado por terrorismo a inicios de este mes.
La capital económica y cultural de Estados Unidos, con 8,5 millones de habitantes, se encuentra en permanente alerta de seguridad desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 cometidos por Al Qaida que derribaron las Torres Gemelas.
El presidente Donald Trump condenó el ataque cometido por un hombre de 29 años quien no ha sido identificado, y dijo que es “una persona muy enferma” y “perturbada”.
El jefe de policía de Nueva York, James O’Neill, informó de ocho muertos, al menos seis de ellos hombres. Once personas fueron trasladadas al hospital con heridas graves, precisó.
El atacante conducía una camioneta de alquiler blanca con un logo de la cadena de ferreterías Home Depot y se metió en el camino de bicicletas y de peatones, atropellando a varias personas antes de estrellarse contra un bus escolar e hiriendo a dos adultos y dos niños. Se conoció que el atacante se bajó del vehículo con las dos armas en la mano y la policía informó que le disparó en el abdomen. Un arma de perdigones y otra que dispara pintura fueron recuperadas en la escena del atentado, dijo la policía.
“Es un día muy doloroso para nuestra ciudad. Una horrible tragedia”, dijo el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio. “Déjenme ser claro, basados en la información que tenemos a este momento, éste fue un acto de terrorismo y un acto de terrorismo particularmente cobarde”, añadió.
“Dirigido a civiles inocentes, dirigido a personas que viven sus vidas y que no tenían idea de lo que les iba a suceder. En este momento sabemos de ocho personas inocentes que han perdido sus vidas. Y más de una docena heridas”, sostuvo el alcalde.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo que la ciudad “es un símbolo internacional de libertad y democracia”. “Eso también nos torna un blanco para las personas que se oponen a esos conceptos, y hemos vivido esto antes”, agregó.
Policías, bomberos y ambulancias rodearon la zona del atentado, a pasos del río Hudson, y bloquearon varias calles, mientras las sirenas tronaban y los helicópteros sobrevolaban el cielo del sur de Manhattan.
Padres preocupados intentaban cruzar las calles bloqueadas, gritando “¡Mi hijo está allí!”, o aguardaban inquietos en la puerta de una escuela primaria donde la salida de los niños fue aplazada por seguridad.
“No vi el tiroteo, pero llegué allí unos 30 segundos después. Vi dos mujeres y niños que corrían hacía mí y gritaban ‘¡Tiene un arma! ¡Tiene un arma!’”, dijo un testigo, John Williams, un joven de 22 años que se dirigía al parque a hacer skate. “Había un fuerte olor de pólvora”.
“Vi que dos autos, uno blanco y un minibús, habían chocado. Dos hombres querían pelear en la calle. Uno tenía dos pistolas, una en cada mano. Y al final llegó la policía. Escuchamos tres disparos (pero no los vimos)”, dijo otro testigo, Manuel Calle, trabajador en un restaurante cercano de 46 años.
Textos y fotos de El Colombiano, diario de Medellìn, Colombia.