Colombia tendría los costos laborales más altos en los países de la Alianza del Pacífico
Un análisis de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, en relación con los costos laborales en los países de la Alianza del Pacífico, mostró que, de aprobarse la reforma, tal como está en materia de recargos nocturnos y dominicales, Colombia tendría los costos laborales más altos de estos países.
En materia de recargo nocturno, México y Chile no contemplan esta remuneración. Colombia y Perú quedarían con un recargo del 35% por hora.
En cuanto a dominicales, Colombia tendría la tarifa más alta de los cuatro países con un recargo del 100%, tal como está en la propuesta, un nivel similar al 100% de Perú, aunque muy por encima del 25% de México y 30% de Chile. En la legislación actual de Colombia, el recargo por trabajo en domingo es del 75%.
La presidenta de la AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, dice que “estos datos hay que verlos desde dos puntos de vista. Por un lado, las pymes que en razón de su negocio, comienzan la jornada laboral en las noches, deben tener personal laborando en el horario nocturno o festivos, tendrán un aumento importante en su estructura de costos y no todas estarán en condiciones de pagar esos aumentos por lo que tendrán que aumentar el valor de sus bienes y/o servicios que se trasladan en costos a los colombianos dentro de una coyuntura de alta inflación y más presión sobre en el poder adquisitivo de las familias o limitar su actividad poniendo en riesgo su subsistencia. ¿Allí uno se pregunta si por pagar mejor los dominicales se sacrifican todos los ingresos?”.
Empleo
A juicio de los empresarios, “el proyecto de reforma laboral que el Gobierno Nacional puso a consideración de los colombianos en el Congreso de la República, reduce la competitividad de Colombia mina la capacidad de generar nuevos puestos de trabajo, genera una cadena de responsabilidades empresariales imposible de manejar con el encarecimiento de los costos de los actuales empleados, desestimula la formalización laboral y genera desequilibrio entre trabajadores y empleadores y se pierde la oportunidad de actualizar el Código Sustantivo del Trabajo para involucrar las normas laborales a frente a los nuevos requerimientos laborales de las empresas y las expectativas laborales en particular de los jóvenes”.
Indica Lacouture que “el Congreso de la República tiene una misión importante, mejorar la propuesta que ha hecho el Gobierno Nacional en materia laboral para que sea un proyecto que contribuya a generar nuevos empleos, estimule la formalización laboral, tenga en cuenta la labor de la pequeña y mediana empresa, los emprendimientos y fortalece la protección de sindicatos grandes en contra de los pequeños afectando la representatividad laboral en las empresas donde existen estas organizaciones”.
Señaló que “este es un mensaje clave cuando tenemos aún un 13% de desempleo, y una informalidad que llega al 58% y la necesidad de garantizar salarios e ingresos sostenibles para las familias colombianas. Si bien el sector privado comparte la intención de ofrecer cada día mejores condiciones a sus trabajadores, las normas propuestas representan retrocesos que no tienen en cuenta las necesidades de talento de las empresas ni las expectativas de empleabilidad de los jóvenes que hoy buscan flexibilidad en su vinculación laboral y no necesariamente estar atados a horarios que limitan sus expectativas de desarrollo”.
Microempresas
Agregó que “sectores claves para el país como es el turismo, prestación de servicios para las microempresas, empresas de trabajadores temporales, servicios de call center, servicios de vigilancia privada, gastronomía, transportadores y emprendimiento, entre otros, se verán afectados porque no tendrán la posibilidad de ofrecer modalidades de trabajo competitivas”.
La presidenta de AmCham Colombia explicó que hay que entender, por ejemplo, que ofrecer flexibilidad en las formas de contratación no representa precarización laboral y por el contrario las empresas quieren impulsar la formalización del trabajador, aumentar los aportes al sistema de seguridad social e incrementar la protección social al empleado.
La rigidez en el sistema de contratación laboral tendrá impacto en profesiones como médicos, docentes universitarios, abogados o inclusive aquellos que prestan servicios a través de plataformas tecnológicas de domicilios o transporte, pues en estos casos suelen desarrollar sus actividades profesionales u oficios en más de una empresa y/o institución. La reforma, tal como está propuesta impedirá esta flexibilización.
El otro punto de vista está relacionado con la competitividad laboral, al aumentarse los costos en el país, los inversionistas empezarían a considerar otras naciones para sus nuevos proyectos o trasladar los actuales en virtud de hacer más eficiente la operación”, explicó Lacouture.
En Colombia hay cerca de 625 empresas de Estados Unidos, tanto de bienes como de servicios, las cuales generan alrededor de 130 mil empleos entre directos e indirectos.
Créditos: Fuente EL NUEVO SIGLO