Gobierno de Venezuela comenzará proceso para retirarse de la OEA
Así lo anunció la canciller de ese país, Delcy Rodríguez, ante la convocatoria de cancilleres.
Publicación de de Bogotà, Colombia
Delcy Rodríguez, canciller de Venezuela, anunció que ese país se retirará de la OEA luego de que el Consejo Permanente de este ente convocara a una reunión de cancilleres de la región para estudiar la crisis por la que atraviesa esta nación.
“El día de mañana (jueves) presentaremos la carta de denuncia a la OEA e iniciaremos un procedimiento que tarda 24 meses”, anunció la canciller venezolana Delcy Rodríguez, en una declaración transmitida por la televisión oficial.
La resolución para citar a los cancilleres fue aprobada por un grupo de 19 países entre sus 34 miembros (más que la mayoría simple de 18 votos).
Argentina, Bahamas, Barbados, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Honduras, Jamaica, Guatemala, Guyana, México, Panamá, Paraguay, Perú, Santa Lucía y Uruguay votaron de manera afirmativa pero sin establecer de momento la fecha precisa de la cita de ministros de relaciones exteriores.
Diez se opusieron y 4 optaron por la abstención.
Caracas, a través de su representante ante este órgano hemisférico, Samuel Moncada, amenazó con retirarse de la OEA si la reunión de consulta terminara realizándose, como efectivamente anunció Delcy Rodríguez.
“Los proponentes de esto no han entendido que la ayuda forzada es imposición. No aceptamos los resultados de una sesión que consideramos ilegal. Estamos haciendo todos los esfuerzos posibles pero si persisten en violar los derechos de nuestra patria iniciaremos los trámites necesarios para separarnos de esta organización”, dijo Moncada.
El funcionario dijo que su país estaba dispuesto a discutir la actual crisis, pero el escenario de la Celac, donde no tienen asiento ni EE. UU. ni Canadá, pero si Cuba.
Venezuela se retirará de OEA si convocan a cancilleres sin su aval
Venezuela solicita con ‘urgencia’ reunión de cancilleres de CELAC
El Salvador, que ostenta la presidencia de este grupo regional, acogió una solicitud que hizo Venezuela para otra cita de cancilleres este próximo 2 de mayo.
Según Moncada, se trata del ambiente ideal pues no existen las presiones de Washington.
Para los países que impulsaron la cita en la OEA, la reunión de la Celac es solo una maniobra distracción pues el órgano solo opera bajo consenso de todos. Es decir, basta con un miembro no esté de acuerdo para que fracase la cita o se apruebe alguna tibia declaración que tendría que recibir el aval de Venezuela.
Además, según la Canciller argentina Susana Malcorra, no tiene sentido que Caracas considere que hay motivos suficientes para reunirse en el marco de Celac, más no cuando se trata de la OEA.
“¿Por qué lo que es grave en un contexto no lo es en el otro? Estamos subestimando la gravedad de la situación…Si no actuamos tendremos en nuestras conciencias los muertes presentes y futuros en este país. Tenemos una obligación colectiva de ayudar a Venezuela” dijo la funcionaria que asistió a la reunión del Consejo en Washington.
De acuerdo con el embajador colombiano, Andrés González, lo que sigue ahora es coordinar con los otros países miembros el mejor momento para citar a la reunión de consulta.
Esta, en todo caso, no sería antes de la prevista en el marco de la CELAC en El Salvador. Y faltatambién ver quiénes terminan asistiendo al encuentro de la semana entrante pues muchos países podrían bajarle el nivel enviando a delegados en lugar de ministros de relaciones exteriores.
Venezuela ha dicho, de momento, que no asistiría a la cita de cancilleres bajo el paraguas del la OEA que sería en Washington.
Aunque todavía quedan pasos por avanzar la decisión del Consejo Permanente de la OEA fue catalogada de histórica por algunos gobiernos pues se adoptó pese a la oposición del país afectado.
“Es histórico. Esta mañana todo estaba nublado y hoy ha salido el sol”, afirmó el embajador de Chile, Juan Anibal Barría.
Jose Miguel Vivanco, director de HRW para las Américas y uno de los asistentes a la reunión, también la catalogó como una “gran victoria” que ojalá, dijo, se “transforme en una cita para exigirle cuentas a Maduro”.