Proyectos de inversión social regional y local serán financiados con recursos del Sistema Nacional de Regalías
COMFACAUCA Y LA NOTCIA DESTACADA DE HOY
La definición de los más de 606 proyectos de inversión social regional y local que serán financiados con más de 10,6 billones de pesos del Sistema Nacional de Regalías abre un reto de amplio calado para el país.
Se comenta ampliamente que se incrementen los mecanismos para vigilar todo el proceso de aprobación, ejecución y entrega de estos proyectos, cuyo listado acaba de ser publicado por el Departamento Nacional de Planeación y que ya tienen aval de la Agencia de Renovación del Territorio (ART), previo el cumplimiento de los hitos establecidos en los términos de referencia de la convocatoria.
De acuerdo con el cronograma, esos 606 proyectos seleccionados deben surtir todo el trámite ante el llamado OCAD Paz, lo que debe estar listo a comienzos de septiembre próximo, luego de lo cual tendrán que cumplirse otros requisitos técnicos, certificados y conceptos multisectoriales.
En medio de la crisis fiscal que arrastra el gobierno nacional central es imperativo que se garantice que estos cuantiosos recursos, que corresponden al presupuesto bianual 2025-2026 que supera los 30 billones de pesos, no terminen siendo blanco de las redes de corrupción, ‘carruseles’ de contratistas y desgreño administrativo, o convertidos en ‘elefantes blancos’.
La semana pasada la Contraloría General, en cabeza de Carlos Hernán Rodríguez, alertó que tras analizar la ejecución de proyectos financiados con regalías entre los años 2023 y 2025, es decir durante el actual gobierno, hubo hallazgos por presuntas pérdidas de recursos o malos manejos por un monto de 2,1 billones de pesos.
Las obras bajo la lupa corresponden a mejoramiento del agua potable y saneamiento básico, construcción de sistemas solares fotovoltaicos y fortalecimiento de sistemas productivos. Se encontraron deficiencias en la estructuración de proyectos y en planeación, lo cual los convirtió en insostenibles.
En época electoral, la lupa sobre el uso de los dineros de las regalías debe ser aún más efectiva, con el fin de evitar que los recursos o las obras terminen imbuidos en la politiquería.
