Seis aspectos a tener en cuenta en la tecnología para los negocios en Colombia

La aparición de nuevos tipos de negocio, como los son las industrias basadas en la economía naranja, el e-commerce y el florecimiento de mercados completamente novedosos como el del cannabis medicinal, se abren paso en la legislación nacional mediante iniciativas que buscan regular toda una gama de innovaciones.
La industria de lo novedoso y el mercado de las nuevas ideas han marcado la aparición de tendencias exitosas respecto a las cuales Colombia no resulta ajena. De tales tendencias exitosas, resaltamos las seis siguientes:
- La evolución o desaparición de las ventas al por menor
Los centros comerciales, tal como se conocen, están en declive. Esto constituye una tendencia evidente que no es exclusiva de Colombia, sino que es un fenómeno que se presenta en el mundo entero. Aquellos se han visto en la necesidad de abandonar sus antiguos modelos y de concentrar sus esfuerzos en ofrecer «experiencias», siendo algo más que un lugar habilitado para la compraventa de productos. Tales van desde la implementación de zonas amigables para mascotas y de mayores áreas de entretenimiento, hasta la especialización en ciertos mercados o productos.
Al ofrecer un mercado de experiencias, más que un simple intercambio, surge la necesidad de actualizar lo relacionado con las normas sanitarias y de gestión de riesgo, para adaptarlas a estos nuevos modelos.
- Los chatbots como primera línea de servicio al cliente
Una de las tecnologías con mayor crecimiento es la de los chatbots. Término que se refiere al software capaz de simular la interacción humana. La posibilidad de automatizar las respuestas hace que el primer contacto de un usuario en una compañía deje de ser una actividad altamente costosa y se convierta en un primer filtro generando mayor eficiencia en la operación.
En Colombia, empresas del sector financiero y de seguros hacen uso de esta tecnología a efectos de mejorar la experiencia del usuario, incluso, algunas herramientas bancarias permiten hacer transacciones y preguntas sobre los mercados en lenguaje natural. El uso generalizado de los chatbots en la industria ha generado una polémica sobre la responsabilidad de estos frente a los clientes, en particular en aquellos que brindan asesorías profesionales en mercados como el financiero, el legal o el médico. Sobre el particular, en Colombia, como ocurre en muchos otros países, está abordando la discusión, que, por ahora, no parece tener ni solución ni regulación a la vista.
- Operaciones D2C (directo al consumidor)
Las operaciones D2C se ven reflejadas en las tiendas virtuales, en las que se perfecciona un contrato de compraventa electrónico de manera directa con la marca, sin necesidad de intermediario alguno.
En Colombia, la mayoría de las marcas icónicas han entrado en esta tendencia. Según datos de la Cámara de Comercio Electrónico, el país ocupó el cuarto lugar en el ranking de mercados de comercio electrónico en Latinoamérica. Se espera que su crecimiento sea exponencial en los próximos años. Las operaciones D2C tienen como ventaja añadida el control que puede ejercer tanto el público como las entidades regulatorias sobre la trazabilidad de las transacciones y sobre la calidad del producto, las garantías y la protección que brinda la normatividad colombiana frente a los derechos del consumidor.
- Popularización de pagos a través de plataformas móviles y fintech
De la mano con las relaciones D2C están las soluciones y plataformas de pago móviles e inteligentes. La llegada de herramientas fintech, como las billeteras móviles, los sistemas de pagos en línea y las tarjetas de crédito virtuales, permiten dinamizar el comercio físico y electrónico. El país ha iniciado esfuerzos en la regulación de esas herramientas mediante la expedición de normatividad específica como el Decreto 1357 de 2018. Sin embargo, muchas de ellas no están reguladas y algunas, como las de origen extranjero, escapan de los controles de la Superintendencia Financiera, por lo cual el consumidor debe ser muy cuidadoso en su uso. - Inteligencia Artificial (IA) aplicada al comercio
En los últimos años se han presentado cientos de soluciones y avances en la IA que tocan cada aspecto del comercio y hallan maneras de mejorar los procesos de negocio que no habían sido siquiera consideradas por los humanos.
La IA no solo se aplica tangencialmente al comercio electrónico, sino que está cambiando la manera de hacer comercio. La llegada de aparatos que incluyen algún tipo de asistente basado en IA permite hacer compras electrónicas sin la necesidad de entrar a una tienda virtual, lo que incluso podría volverlas obsoletas.
- La información, el nuevo objeto de comercio
Entendiendo que la base de la IA es tener grandes cantidades de datos, resulta evidente que la adquisición y manejo de información se ha convertido en el nuevo commodity, incluso publicaciones especializadas han afirmado que los datos son el recurso más valioso en el planeta, por encima del petróleo.
Este es un enorme reto regulatorio por parte de los gobiernos. Iniciativas como la de protección de datos por parte de EE. UU. y Europa son las primeras respuestas a la necesidad regulatoria. Otros países como China permiten el uso total e ilimitado de los datos generados por sus ciudadanos, lo que se ha considerado como una de las ventajas del país asiático sobre sus contra-partes occidentales.

Por: Jorge Alejandro García Pérez
MONCADA ABOGADOS