La historia del falso piloto que llevó pasajeros durante 24 años
Un hombre sudafricano con documentos falsificados logró engañar a una línea aérea durante más de dos décadas en las que trabajó como piloto de avión comercial. Su increíble historia se compartió en redes sociales y generó conmoción entre los usuarios.
La información la dio a conocer el sitio Mail & Guardian, el portal que informó que William Chandler, quien trabajó para la aerolínea sudafricana SAA (South African Airways) durante 24 años tras ser contratado en 1994, fue obligado a renunciar tras una “maniobra irregular” de la cual no hay muchos detalles.
Lo único que se sabe es que el incidente se produjo durante un vuelo entre el Aeropuerto Internacional OR Tambo de Johannesburgo y Frankfurt, Alemania. Exactamente en el espacio aéreo de suizo.
“Realizó algunos giros extraños con el avión que nadie entendió, incluso los propios tripulantes de cabina”, llegó a decir uno de los empleados de SAA. Si bien el caso se mantiene en estricto secreto, el vocero de SAA, Tlali Tlali, agregó: “Cuando se enfrente a tales incidentes, se debe hacer lo siguiente, ya sea de forma correctiva, disciplinaria o de otro tipo. Este proceso forma parte de nuestros procedimientos operativos estándar”.
Adicionalmente, se reveló que, en el momento del incidente, Chandler era el piloto supervisor (copiloto) y no el capitán a cargo.
Es por esto que no había querido ser promovido a capitán ya que hacerlo habría significado que revisaran su documentación y que revalidaran su certificación para volar.
Afortunadamente, ningún pasajero resultó herido o muerto durante todo el tiempo que este falso piloto estuvo a cargo del transporte aéreo de pasajeros. Y más allá de la estricta restricción de la compañía de no revelar ningún dato sustancial de la causa, se espera que Chandler quede detenido en las próximas horas.
El caso hace recordar a la película Atrápame si puedes (Catch Me If You Can, en la versión original en inglés), el film del 2002 basado en la vida de Frank Abagnale Jr., quien antes de cumplir diecinueve años consiguió millones de dólares haciéndose pasar por piloto de una línea aérea, por médico y por abogado. Su principal modus operandi era la falsificación de cheques, delito en el que logró tanta habilidad y experiencia que el FBI finalmente lo reclutó como asesor en ese tipo de fraudes. Steven Spielberg dirigió la película, y fueron protagonistas Leonardo DiCaprio como Abagnale y Tom Hanks como el policía Carl Hanratty. Quizás inspirado en la historia de Abagnale, Chandler le mintió a todos durante más de 20 años.
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